La Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR) acaba de publicar la nueva versión de la norma UNE 100030 después de una revisión exhaustiva de los principales agentes implicados en el sector climatización y tratamiento del agua, que han buscado adaptarla al contexto actual. Esta nueva revisión substituye así a la Norma UNE 100030:2005.
La UNE 100030:2017 incorpora nuevos criterios e indicaciones para la prevención y el control de la proliferación y la diseminación de las bacterias del género Legionella en determinadas instalaciones y equipos. De hecho, el objetivo principal de la norma persigue disminuir al máximo el riesgo de contraer la legionelosis, enfermedad producida por esta bacteria.
La UNE 100030:2017 es de aplicación a las instalaciones que utilicen agua en su funcionamiento, que generen aerosoles y que estén ubicadas en el interior o exterior de edificios, equipaciones industriales o medios de transporte, y que puedan llegar a convertirse en focos de propagación de la enfermedad, durante su funcionamiento, pruebas de servicio o mantenimiento.
Esta nueva norma no es de aplicación para las instalaciones de uso sanitario/terapéutico, si bien sí que realiza recomendaciones para algunas de ellas.